Habíamos tratado sobre el tema, pero esta vez fue el Oráculo que lo abordó en su más reciente encuentro.
¡El Oráculo quiere saber quién le habrá dicho a Melymel que proyectar la imagen de obsesa sexual vende?.
Ahora en las entrevistas le hacen, sin que nadie le haya asignado el papel, se ha tomado muy en serio el rol de La Femme Fatale, asumiéndose por voluntad propia con una capacidad y un apetito sexual insaciable.
Melymel pregona a viento y marea que para sentirse satisfecha, sexualmente, necesita ser poseída tres veces al día.
Se quiere proyectar, de ese modo, como una mujer precocida, cuando en el fondo puede que no pase de ser una descafeinada de esas que son “mucha espuma y poco chocolate”.
No se da cuenta de que su universo sexopata, y la imagen recurrente infartante en el sexo colinda a veces con lo aberrante.
De repente la rapera, le hace honor al nombre, y se comporta como los obsesos sexuales que se masturban a plena luz del día en cualquier esquina.
Debería sacar ese item de su lista de ofertas de galimatías para llamar la atención.
En vez de orgásmica, debería asumir una actitud orgánica frente a la vida y el medio, alejada del desenfreno y la concupiscencia, evitando en lo posible caer en una posición tangencial respecto a la práctica del sexo
A esa conclusiones llegó el Oráculo en su reunión del pasado viernes
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