Sí, aún el sexo oral es un tabú para ciertas personas, de ambos géneros y por distintos motivos. Para aquellos que ven en esta práctica, un camino para seguir la ruta del orgasmo, saben del placer que se puede brindar mutuamente y las diferentes formas en que se puede hacer.
Aquí recogemos algunas poses en que la pareja podrá disfrutar aún más el sexo oral e intensificar sensaciones. Algunas conocidas, otras nuevas y otras algo arriesgadas, hay para todos los gustos.
1. Los prisioneros
Ella recostada sobre una almohada y tú arrodillado con las piernas alrededor de su torso y bajo sus axilas. Tú podrás moverte hacia adelante y hacia atrás y ella hacer buen uso de sus manos y boca. En el caso inverso, ella estará de rodillas a la altura de tu cuello, depositando su vagina en tu boca, ella podrá dominar el movimiento con sus caderas y sentir la sumisión de su compañero, quien tendrá la profundidad necesaria para que su lengua haga lo debido, y las manos libres para acariciar, piernas, nalgas, etc.
2. El acantilado
Para esta pose, la dama tendrá que sentarse al borde de la cama boca arriba, y mantener las piernas recogidas sobre el colchón. Tú te arrodillarás sobre tus piernas, e inclinarás su cabeza hacia abajo, directamente sobre el clítoris. Esta pose también te permitirá tener las manos libres para jugar con el resto de su cuerpo. En el caso inverso, la posición es la misma y ella tendrá toda la posibilidad de jugar con los testículos y estimular el punto G masculino.
3. El perrito
Esta variante del clásico perrito es una posición muy caliente, que da el control del ángulo y la presión. A la ya conocida pose de penetración, el hombre desde atrás satisface a la mujer, y tiene una vista impresionante de ella.
4. 69 lateral
El clásico 69 pero de lado, en donde ambos tendrán los glúteos al aire para poder ser acariciados. El secreto de esta pose es dar placer sin matarse las rodillas o un calambre en el cuello.
5. El sofá
Tú echado con la cabeza sobre una almohada y con las piernas flexionadas. Ella se sienta sobre tu pecho con la vagina dirigida hacia tu boca y se arrecuesta sobre tus piernas y solo se deja llevar. Tú tendrás frente a ti el panel de control del placer, así que aprieta muy bien cada botón y haz muy buenas combinaciones, ella te lo agradecerá.
6. El 69 de pie
Esta es para valientes. Requiere una mayor fuerza, resistencia, y, sobre todo, fe en sí mismos. Si no hay confianza plena entre ambos, ni siquiera intentar esta posición. La pose se inicia sentados, percatándose que ambos estén bien aferrados a sus cinturas y ella tenga las piernas muy bien envueltas alrededor de tu cuello. Luego ponerse de pie lentamente. Agotador, innovador pero muy placentero.
7. Pastel del cielo
Ella arrecostada sobre su espalda, levanta las piernas estiradas y las deja caer sobre ella en “v” en una especie de medio volantín. Tú solo deberás aprovechar esa vista y poder acariciar con lengua, nariz, mentón y labios el ano, el perineo y la vagina. Dependiendo de tus movimientos verás que tu lengua podrá acceder de manera más profunda en ella. Al tener las manos libres puedes acariciar los senos y realizar leves cosquillas en la parte inferior de las rodillas para intensificar el placer. Esta posición es buena como preámbulo a la penetración, ya que solo bastará bajar las caderas para comenzar con la danza.
8. Molino
Si hay una invitada más a la sesión amatoria, no deberá quedarse fuera de la diversión oral. Mujer – hombre – mujer, en donde el caballero estará echado de lado para poder brindar placer a su compañera que estará echada, y a la vez darle comodidad a la invitada que le brindará placer a él.
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