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2/6/15

Cantante puertorriqueño apuesta por la bachata tras superar el cáncer

PUERTO RICO. El bachatero puertorriqueño Jay Ruiz manifestó su orgullo por haber sido reconocido como intérprete del género en la República Dominicana, al que se ha consagrado tras haber ganado la batalla a un cáncer que puso en peligro su vida.

De acuerdo con una reseña que publica el diario El Nuevo Día, de Puerto Rico, el cantante, de 30 años, sintió una gran emoción durante una visita reciente a República Dominicana, donde grabó el vídeo de su sencillo "Dime tú" con la cantante dominicana "La Materialista".

"Fui aceptado formalmente en la República Dominicana como el primer bachatero puertorriqueño, es un orgullo para mí ser reconocido", manifestó Ruiz a El Nuevo Día.

El lanzamiento del artista, quien toca batería, guitarra y bajo, fue a finales del año pasado, con su primer sencillo "Ven a mí, Girl" que alcanzó la posición número once en las listas de Billboard Tropical. 

Pero antes de alcanzar sus sueños de ser artista, Jay Ruiz debió enfrentar una dura prueba, cuando a los 16 años fue diagnosticado con un linfoma de Hodgkin en el cuello y la garganta que, no sólo puso en peligro su vida, sino también la posibilidad de que volviera a cantar.

En entrevista concedida a El Nuevo Día, expresó: "Soy un milagro de Dios. Estuve en Washington para hacerme unos estudios un poco más avanzados y recibir quimioterapias. Uno de los tumores estaba ubicado en la garganta y no me aseguraban, me dieron siete meses de vida. Fui desahuciado".

A los cinco meses de recibir tratamientos, relata el cantante, "recibí la bendición de Dios y el cáncer desapareció, Dios me salvó".

Jay Ruiz reside en Nueva York y actualmente se encuentra en Puerto Rico promocionando su tercer sencillo "Dime tú", que será parte de su primera producción discográfica de once temas, uno de estos de su autoría.

"La canción trata de este joven que tiene una noche de pasión con una muchacha y se enamora de ella, pero no la vuelve a ver más y él le pregunta por qué lo abandonó", explica.

El bachatero comenzó a cantar a los seis años en la iglesia presbiteriana, a la que asistía con su familia.

Dice que eligió un género tan erótico como la bachata "porque cuando comencé a escribir me gustó y sé que mucha gente se puede identificar con las canciones que interpreto. Es un género bien sensual y todas mis canciones son de desamor".

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