Don Miguelo En Las REdes

Don Miguelo adquirió un autobús para el transporte de sus músicos, con capacidad para 32 pasajeros.

Lo anunció él mismo a través de las redes sociales con el siguiente mensaje:

"Nueva montura para mis músicos porke ellos también merecen estar cómodos como yo... gracias a Dios y a ustedes k sustenta a este obrero de la música... qué les parece?" 

Muy bien y aplaudida la iniciativa, porque muchos urbanos sólo se preocupan ellos por adquirir costosos carros, mientras sus músicos tienen que llegar a los lugares de trabajo en carros públicos, y si es en el interior del país, en transporte. alquilado.

¡Pero hasta eso lo critican!¡Oh my god!

Ya están diciendo por ahí que se trata de ¡una voladora!

Que es similar a las de Juan Hubieres.

Pero ¡Virgen de la Altagracia!, ¿y qué pretenden? ¿Un autobus de la Metro  con capacidad para 56 personas?

¡Ah pues, tal parece que creen que estamos en México, donde las bandas gruperas andan en los llamados "camiones", autobuses gigantescos que son hoteles andantes a la vez, que cumplen el propósito de poder recorrer grandes distancias sin parar, contando con baño, dormitorio, cocina, sanitario y todo lo necesario para pernoctar en ellas.

¿Hay que comprar una guagua de esas para ir a Bonao o a San Pedro de Macorís? ¡Por Dios! 

Pero ¿adivinen qué?

¿Saben de dónde vienen esos ataques tratando de minimizar el palo que ha dado Don Miguelo con sus músicos?

¡De los mismos urbanos!

Igual sucede en el merengue, donde al Torito le critican que trate tan bien a sus músicos, pues algunos dicen que les echa una vaina, pero que se perjudica él mismo, porque cuando tiene que prescindir de un músico, con un salario tan alto, tiene que pagarle millones de prestaciones.

¡Vaya usted a ver!

El asunto es que "palo si bogas, y palos si no bogas".

Lo que sucede es que ese tipo de acción le abre los ojos a los demás músicos, que trabajan solo "por la comida", mientras los líderes se hacen multimillonarios, sin recibir atenciones ni compensaciones.

Lo que cobran los martes, ¡y ya!

Si me pasé me avisan, pero hablo por los de abajo, aunque no lo agradezcan...