En estos días se ha mencionado bastante sobre los comentarios inapropiados que han hecho comunicadores y periodistas en platas televisoras internacionales y los posteriores despidos por causa de estas circunstancias.
Los medios se han hecho eco de las expulsiones, unos en contra y otros en favor por las acotaciones soeces que emiten algunos comunicadores sobre figuras, personalidades y artistas.
El despido de Rodner Figueroa de Univisión por lanzar comentarios racistas contra Michelle Obama causó furor en las redes y medios nacionales e internacionales.
Ahora le ha tocado el turno a Alex Otaola, uno de los panelistas del programa Paparazzi TV, quien también fue suspendido luego de pronunciar algunas palabras inapropiadas para el horario familiar en que se transmite el espacio televisivo.
A pesar de que la autocensura no debe ser plato principal en ningún medio de difusión donde se labore, sea escrito, digital o televisivo, entendemos que cuidar la forma y el fondo debe ser el norte de cada comunicador y periodista.
Si extrapolamos esta situación a nuestro país, nos damos cuenta como aquí no se respetan ni horarios ni el público que puede estar viendo determinado programa a una hora específica.
Tampoco se cuidan los comentarios que se emiten, a tal punto que en ocasiones hasta con nombre y apellido mencionan a las figuras para despotricar en contra de ellas.
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