Aunque nació con 3,700 durante los primeros meses engordó 300 gramos por mes hasta llegar a un grado de obesidad que le dificulta caminar y respirar. Los médicos sospechan de una condición genética.
Misael es un niño en Brasil que todavía pide estar en la falda de su madre, Josaine de Jesús. Pese a que sólo tiene tres años, ya pesa 70 kilos, supuestamente, debido a un desorden genético.
Aunque Misael nació pesando tres kilos 750 gramos, durante los primeros meses de vida engordó 300 gramos por mes, hasta llegar a un grado de obesidad que ahora le dificulta caminar y respirar.
osaine dice que cuando notó que su hijo comenzó a engordar, lo primero que preguntaron los médicos fue que si estaba comiendo de más.
“Yo les dije que no le estaba dando nada que no pudiera comer”, afirmó la mujer, en declaraciones a Rede Globo. Pero a partir del año comenzó a subir de peso más aceleradamente, a razón de un kilogramo por mes.
Hasta ahora, la familia no sabe exactamente qué es lo que causó el aumento de peso. Aunque los endocrinólogos le diagnosticaron hipotiroidismo y comenzó a ser tratado, el niño no dejó de subir de peso.
Ahora el trabajo estará a cargo de un genetista, quien debe de realizarle una prueba para confirmar si Misael padece de un raro desorden genético. Pero debido a la condición económica de la familia, ellos no pudieron cubrir el costo del examen, de alrededor de 600 dólares, por lo que están a la espera de que el Departamento de Salud lo apruebe.
